Para algunas personas como yo que no podemos considerarnos expertos en literatura y menos en la literatura de nuestros coterráneos, podría resultar una desagradable sorpresa conocer las razones por las que Humberto Ak’abal se negó a recibir el Premio Nacional de Literatura Miguel Angel Asturias en su 16a. edición.
Según la publicación de Estuardo Zapeta ayer en Prensa Libre, Humberto Ak’abal rechazó el premio sencillamente por el autor que le da el nombre: “Miguel Angel Asturias”. Me causó una sorpresa bastante extraña conocer que ésta era la razón del rechazo y luego la sorpresa se convirtió en decepción y desagrado al saber los detalles.
Ak’abal se siente halagado con el premio y reconoce la calidad literaria de los escritos de Asturias, pero se siente ofendido (con toda razón) por la tesis que sirvió para que se graduara de abogado, tesis titulada “El problema social del indio” donde en pocas palabras denigra a las etnias indígenas guatemaltecas llamándolas razas inferiores y sugiriendo claramente un mestizaje cultural para mejorar la población de nuestro país y así acelerar su desarrollo ya que en su opinión expresada a través de esa tesis, nuestro país ve frenada su mejora sencillamente por las características de los indígenas guatemaltecos.
¿Qué piensan ahora de Miguel Angel Asturias? Quien en este escrito habla del indígena como un ser haragán, sumiso, conformista, borracho, tonto, débil y genéticamente degradado por la explotación comparándolo con un animal sin aspiraciones en la vida… Si bien su tesis es un tipo de protesta sobre la condición del indígena guatemalteco, resulta ser una ofensa para toda la raza humana.