Ya podemos contar en horas lo que falta para las elecciones, en el ínterin hemos interactuado como sociedad en un proceso consciente de ciudadanía, de alguna manera ver todos los rotulitos y los foros, leer las noticias, resúmenes de los informes, etc. es parte de este deber civil (aunque para muchos candidatos no es necesariamente civilizado).
Al parecer la obscena violencia de nuestra sociedad se ha convertido en la principal anécdota de las elecciones, violencia explícita esa de las amenazas de muerte, de los atentados, de la vida de personas que fue atravesada por una esquizofrénica lucha de poder. Violencia simbólica la de las campañas negras, la de los juegos sucios entre partidos e instituciones (la fallida candidatura de Arredondo y la extraña burocracia en que se tropezó Caballeros), comentarios campeones como “Dios dijo Adán y Eva, no Adán y Esteban” vaya ética para hablar de homosexualidad, o “los indígenas tienen una conducta que en determinado momento les brota el resentimiento contra el ladino”, ¡qué belleza!, y un larguísimo listado de mmm… estupidos comentarios.
Pero también la juventud organizada y entusiasta: Feria Juvenil Política, y los blogueros como un foro virtual donde además de intercambiar ideas importantes hacemos chistes importantes (el sentido del humor es una anécdota especial).
El huracán Felix, el partido de fútbol de los candidatos y Carlos Peña como el candidato preferido de muchos, también el empate en la encuesta le pone sabor a estas accidentadas fechas.
Se me ocurre hacer un ejercicio, elijamos las 7 maravillas de las elecciones 2007, empecemos el listado y luego, más adelante, votamos de nuevo:
- El sombrero del candidato de la UCN
- La Hummer amarilla del candidato a Alcalde de Jutiapa
- Los doblajes al buen chapín con motivo de los candidatos
- Los dibujos en las fotos de los candidatos: los bigotes, los dientes sholcos, los cachos
- Los correos de campañas negras
no sé, para empezar, a ver qué se nos ocurre…